Oftalmología infantil

El desarrollo de la visión se va completando a lo largo de los primeros años de vida, tardando en alcanzar su madurez hasta los 7-9 años. Por ello, un adecuado funcionamiento del sistema visual en estas edades va a conseguir un desarrollo funcional óptimo en la edad adulta.

Ojo vago (Ambliopía)

Cuando el sistema nervioso encargado de la visión no es correctamente estimulado va a repercutir en una falta de desarrollo y, por lo tanto, una baja visión.

Nuestro sistema nervioso visual necesita que le lleguen imágenes nítidas y similares de ambos ojos. Cuando esto no ocurre, desarrollará en menor medida o suprimirá la imagen de peor calidad.

Niños con graduaciones (miopía, hipermetropía o astigmatismo) altas, no van a estimular correctamente al sistema visual para su adecuado desarrollo. Si no son diagnosticados y corregidos con graduación estos defectos en edades tempranas, el desarrollo visual se verá comprometido, no alcanzando agudezas visuales normales por uno de los ojos o por los dos, teniendo lo que se conoce como un ojo vago o ambliope.

Situación similar ocurrirá en aquellos pacientes con desviaciones oculares (estrabismo), si no se envían al cerebro las mismas imágenes por estar los ojos desviados, el sistema nervioso elegirá uno que será el dominante, desarrollando un ojo vago en el otro.

Estrabismo

El estrabismo es la desviación de uno o de los dos ojos. Las causas pueden ser múltiples y es necesario tanto detectarlo, como estudiarlo para poder corregirlo y permitir el correcto desarrollo visual del niño.

Miopía

La miopía es un defecto de la refracción o graduación que conlleva la formación de las imágenes por delante de la retina, viéndolas desenfocadas. La visión lejana se verá más comprometida. Se puede corregir con gafas, lentillas o cirugía.

Hipermetropía

En este caso, el defecto de graduación produce que las imágenes se formen detrás del ojo, teniendo que acomodar la visión para verlas correctamente en hipermetropías bajas o no llegando a enfocarlas correctamente y produciendo disminución de la agudeza visual lejana en graduaciones más altas. Al necesitar acomodar más dioptrías para la visión cercana, la hipermetropía se asocia a “ver mal de cerca”. Se podrá corregir también con gafas, lentillas o cirugía. 

Astigmatismo

Este defecto de graduación lo podemos encontrar aislado o acompañando a una miopía o hipermetropía. En este caso, no tiene relación con la longitud del ojo, si no con las diferencias en la curvatura de la córnea, produciendo visión desenfocada en todas las distancias.

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